Ya casi estamos en Navidad, queda poco. Pero antes llega la Purísima, fiesta mariana por excelencia (antiguamente era el Día de la Madre) y además es el día de poner belenes, árboles y adornos navideños varios.
Para esta fecha, como ya viene siendo habitual, la Virgen se viste de azul (no como la muñeca sino como la Inmaculada Concepción). Y este año, además, va especialmente guapa. Admirad la forma en que la han vestido sus camareras y su vestidor, con el mayor de los mimos y con todo su cariño.
Seguirá así vestida hasta después de Navidad, así que no tenéis excusa para no pasar a verla, ella os estará esperando vestida de Reina y con la mejor de sus sonrisas.
En otro orden de cosas os recuerdo que el miércoles 14 a las 21,30 horas, hay que entregar la recaudación de la Lotería de Navidad y recoger el décimo que nos corresponde a cada una de nosotras del número de la Hermandad en el Sorteo del Niño.
Hasta entonces.
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